Hace unas semanas tuve ocasión de ver una de las películas que estaba deseando, Interestellar. No voy a contar la película, tranquilos no hay riesgo de spoiler, pero si quiero destacar un aspecto relevante que me hizo recordar el proceso de innovación dentro de las grandes empresas y por qué éstas están teniendo dificultades para competir con otras organizaciones en el mundo digital.
En la película, Matthew McConaughey emprende un viaje para tratar de localizar un planeta donde la humanidad pueda sobrevivir, ya que nuestro planeta está enfermo de muerte, y visitando alguno de los planetas marcados como ‘potencialmente habitables’ se encuentra que está muy cerca del horizonte de sucesos de un agujero negro, lo que tiene un efecto relativista demoledor, que no es otro que unos pocos minutos en el planeta, se convierten en años de tiempo en La Tierra. El pobre de Matthew tuvo que invertir algunos minutos más en su visita, lo que se tradujo en varios años ‘perdidos’ en el contexto de la Tierra.
Al ver esta situación, mi cabeza comenzó a pensar que justo esto es lo que está ocurriendo en el mundo y como el dominio que algunas empresas tienen de la tecnología, les permite dilatar su tiempo e ir mucho más rápido que las grandes organizaciones tradicionales. Me explico… Algunos valientes hace unos años iniciaron un viaje hacia una nueva galaxia de la informática y aterrizaron en el planeta Open Source, que también está en una zona donde el tiempo se dilata. Esto es debido a que en su nueva civilización tienen por costumbre compartir todos los avances que hacen, reutilizar todo su código, sus mejores prácticas, sus avances más relevantes, sus problemas y cómo los han resuelto. Con todas estas prácticas han conseguido entre todos crear un ecosistema donde los resultados se consiguen en una fracción de tiempo y con mucho menor esfuerzo, lo que implica que 2h en este planeta son varios meses en el planeta de la empresa tradicional.
Además hicieron un hincapié por invertir sus energías en lo importante, lo relevante y simplificar los procesos burocráticos, las capas de grasa que aportan poco valor a los proyectos y adoptar metodologías de desarrollo ágiles orientadas a entregar a los usuarios lo que éstos demandan en el menor espacio de tiempo. En aquel mundo planificar a largo plazo era un lujo, y por eso vivían al día con una mayor comunicación y colaboración entre los áreas de negocio y tecnológicos, algo que desde los tecnólogos del planeta Tierra se veía con recelo y estupor. El resultado es que construyeron unas bases sólidas sobre las que otros ingenieros que iban llegando a su nuevo planeta se apoyaban, vieron que herramientas y documentación eran útiles y cuáles no lo eran, y lo que implicaba que en su planeta el tiempo se iba dilatando, ellos no eran conscientes, pero desde las áreas de TI de empresas tradicionales cada vez se veían más y más innovaciones, más complejas, más útiles y con mayor frecuencia.
Algunas empresas en aquella época, por cierto, ahora algunas de las más rentables del planeta, observaron el valor y la ventaja competitiva que suponía apoyar a esta comunidad y obtener esta velocidad de crucero que ahora no tenían, y comenzaron a utilizar y a enviar sus propios ingenieros a conquistar el nuevo mundo, no sólo cosechando lo que otros habían hecho, sino aportando también su valor en el nuevo planeta Open Source, por lo que el tiempo se dilataba cada vez más.
Ahora las empresas tradicionales, al verse amenazadas en sus negocios, al fin han visto las consecuencias, y emprenden procesos de cambio a los que han llamado «Transformación Digital», «Cloud Computing», «Mobile First», etc. Estas iniciativas están bien, pero la clave más importante que deben considerar es abrirse al modelo Open Source, a los métodos ágiles y eliminar las viejas formas de hacer que existen en los áreas de sistemas actualmente.
La gran clave para triunfar en el mundo empresarial es la orientación al cliente, pero éste no es estático sino muy, muy dinámico. Si nuestras empresas no son capaces de innovar a la velocidad de nuestros clientes, éstos dejarán de serlo.